viernes, 15 de febrero de 2013

Unforgiven - Sin perdon


Los westerns me recuerdan a las tediosas tardes de verano, a esas interminables tardes llenas de aburrimiento, calor, ciclismo  y "una de vaqueros". Dias en los que solo habia una tele en casa y te tocaba ver lo que tus padres querian.  

Con un poco de suerte, te echabas la siesta en el viejo sofa de sky y te ahorrabas el tour, el giro, la vuelta o lo que se celebrase. A veces hasta el comienzo de la peli de vaqueros en Tve o Etb2.

De lo que no te librabas era de tu padre, reclamando su derecho al mando y a ver la de vaqueros. Y las veía todas.

Mi padre era un amante de todo lo relacionado con el western y un devorador de las novelas de Marcial Lafuente Estefanía. Eran unos librillos finisimos, con una letra minuscula y ambientados en el antiguo oeste, que mi padre leia antes de dormir. Recuerdo irme a dormir y ver la luz de su mesita saliendo por la puerta entreabierta, difuminandose por el pasillo. 

No he visto una cosa igual. Años mas tarde, intentamos que leyera otra cosa, pero no hubo manera. Solo de vaqueros. Y solo de Estefanía, el resto de autores pareció no hacerle mucha gracia.

Tras acabar el taco de novelas que tenia, soliamos ir "a cambiarlas". En la Txitxarra habia una tienda de chucherias donde llevabas tus novelas y, pagando equis pesetas, las cambiabas por otras. Debia ser algo habitual antes, porque me suena que habia otras tiendas por Santurtzi en las que se hacia lo mismo.

Los ex-propietarios de los librillos dejaban marcas, iniciales o cualquier otra señal que les hiciera saber que lo habian leido con anterioridad.

Como os decía, aún con todo, las películas del oeste no me gustaban, por esa relación que tenían con las pegajosas tardes de verano de mi infancia.

Pero con "Sin perdón" y, sobre todo, "Appaloosa" me estoy reconciliando con el género.

Sin perdón, perfectamente dirigida por Clint Eastwood, nos cuenta la historia de William Munny (Clint Eastwood), un pistolero sin piedad retirado. Munny, alejado de cualquier persona a la que poder matar, recibe una visita de un joven que le propone matar a dos vaqueros que han rajado la cara a una prostituta a cambio de una suculenta recompensa. Recompensa que entregaran las compañeras de la prostituta agredida, ofendidas por el castigo impuesto por el sheriff local (Gene Hackman) a los dos vaqueros.

Han pasado los años para Munny, ya no es el malhechor que era, asi que decide ir a por la ayuda de su ex compañero de fatigas (Morgan Freeman), un experto tirador con el rifle.

La narración es exquisita, comenzando con un texto introductorio (que tendrá su final al acabar el film) para, despues, comenzar el largometraje con la agresión a la prostituta.

El guión es sencillo pero muy solido, los dialogos desmitifican todo lo rodado anteriormente en cualquier western, como ya nos indica Gene Hackman en la escena donde esta en la carcel con Richard Harris y su biografo.

Las interpretaciones muy buenas, aunque el film tambien cuenta con primeros espadas. Destaca Gene Hackman. No es de mis actores preferidos pero lo borda. Aunque todos los protagonistas estan de diez, el que menos se acerca al nivel del resto es Morgan Freeman, volviendo a hacer de santurrón.

Como nota discordante mencionaría el tono crepuscular (creo, ademas, que en todas las películas dirigidas por Eastwood, se nota ese tono que menciono.Vease Gran Torino, Million Dolar Baby o Sin Perdón) de la película. Ojo, lo tiene que tener por el tipo de historia que es, pero creo que a veces abusa de ello, en escenas y dialogos (exactamente iguales) que vemos y escuchamos en varias ocasiones a lo largo del largometraje.


Una película muy recomendable, aunque no seais amantes del género. Un 8.

La semana que viene, el Rey León.






   

sábado, 9 de febrero de 2013

Géneros: Terror


Me gustan las películas de terror. Las sufro enormemente. En un ejercicio de brutal masoquismo, he ido a ver una "de miedo".

Es un género con el que mantengo una relación de amor/odio. Seguro que a vosotros tambien os ocurre lo mismo.

Lo he pasado fatal. Y creo que eso es lo bueno, volver medio acojonado a casa, que es lo que uno se espera en estos casos.

Verla con los ojos bien abiertos para medio cerrarlos en el momento en el que SABES que va a venir el susto.

Agarrar bien fuerte, con una mano, la chamarra, intentando, a la vez, ver y no ver que pasará y, con la otra, apretar la mano de tu señora tan fuerte como el susto que te llevas.

Saltas de la butaca, gritas: "¡JODER!", y piensas: "¿Quien me mandará venir a ver esto, a pagar por sufrir?".

Pues nadie. Uno lo hace encantado, aunque siempre sea la misma cantinela. Las mismas situaciones en todas las películas: Que si detras de la puerta esta el monstruo, que si no vayas sola y de noche (¿a quien se le ocurre?) a esa cabaña, que si no abras el armario... Pero, aunque sepamos lo que va a ocurrir y cuando va a pasar, nos llevamos el susto como la primera vez.

Tras acabar ese calvario, sales del cine sabiendo que todo es mentira, que son actores y todo esta preparado. Que pena no darte cuenta antes.

Pero, saber eso no te impide subir el ascensor sin mirarte en el espejo por temor a que aparezca algun fantasma, ni subir los 4 escalones que hay hasta el ascensor a toda ostia por si te alcanza algun psicopata, ni a ponerte a escribir esto en vez de meterte en la cama a dormir, no vaya a ser, que en medio de la noche, le de por crujir a la madera.